Ética de las relaciones sexuales y amorosas
 La expresión de la sexualidad suele reflejar los valores y creencias personales en cada momento vital. En nuestra sociedad, la vivencia de la sexualidad está influenciada por los valores de la cultura judeocristiana y por los de otras culturas, cada vez más presentes. Dichos valores suelen ir asociados a formas de culpabilización y penalización de la persona que los transgrede.
Por otra parte, vivimos en una sociedad de consumo que ha hecho de la sexualidad un producto más y en la que las relaciones amorosas y sexuales se banalizan. El consumo compulsivo de la sexualidad se identifica con la felicidad.
La sexualidad también se utiliza como reclamo publicitario y se relaciona, sobre todo, con el atractivo físico de la juventud y con la seducción para buscar el propio placer, independientemente del placer y bienestar de la otra persona. 
En todas las sociedades, las normas y costumbres relacionadas con la sexualidad tienen que ver con cómo se entienden:
- El cuerpo y el placer
 - La finalidad de establecer una relación afectiva y sexual
 
Las sociedades humanas, del mismo modo que cada una de las personas que las integran, están en constante evolución. En la actualidad, se observa una tendencia a dotar a las personas de libertad para decidir por sí mismas sobre la forma cómo quieren vivir su sexualidad. A la moral sexual, la sexualidad banalizada y la utilización de la sexualidad como instrumento al servicio del consumo, se contrapone otra forma de entender la sexualidad y las relaciones, basada en los siguientes principios éticos:
- Consentimiento
 - Placer y bienestar compartidos
 - Igualdad
 - Honestidad
 - Salud sexual
 
Estos principios, tal y como explica Félix López, pueden ayudarnos a cometer menos errores, evitar sufrimientos y disfrutar más y mejor de nuestra vida sexual y amorosa. En definitiva, nos permiten utilizar la libertad para tomar las mejores decisiones y disfrutar de la mejor salud, individual y colectiva.
| 
 CONSENTIMIENTO En las relaciones sexuales y amorosas hay que reconocer y considerar siempre la libertad y la dignidad propia y de la pareja, sin instrumentalizar nunca a la otra persona para buscar únicamente el propio beneficio, de manera que tanto nosotros como la otra persona nos sintamos libres de aceptar o no esa relación.  | 
|
| 
 Razonamiento  | 
 Ejemplo de comportamiento contrario  | 
| 
 Exige capacidad de negociación y tolerancia a la frustración. No podemos hacer siempre lo que nos gustaría, existen límites.  | 
 Manipular, presionar, obligar, forzar o agredir a una persona para tener relaciones sexuales o tener con ella una relación de pareja.  | 
| 
 PLACER Y BIENESTAR COMPARTIDOS Cuando dos personas tienen relaciones sexuales, además de buscar el propio placer, tienen que ocuparse e intentar que la otra disfrute y sienta satisfacción en la relación.  | 
|
| 
 Razonamiento  | 
 Ejemplo de comportamiento contrario  | 
| 
 Las personas no son objetos que se utilizan; por ello, la relación sexual requiere conocer y respetar los gustos y preferencias de la persona con la que se comparte una experiencia tan íntima.  | 
 Buscar únicamente el placer y bienestar propio sin tener en cuenta si la otra persona se siente a gusto.  | 
| 
 IGUALDAD En las relaciones sexuales y amorosas las dos personas tienen los mismos derechos y obligaciones; las normas, la ética o la moral sexual tienen que ser igualitarias y las personas involucradas en la relación tienen que tratarse con justicia y equidad.  | 
|
| 
 Razonamiento  | 
 Ejemplo de comportamiento contrario  | 
| 
 Supone superar los estereotipos de género o cualquier aspecto que otorgue superioridad a uno de los miembros de la pareja: clase social, situación económica...  | 
 Criticar a una chica por llevar preservativos, decir que es una fresca.  | 
| 
 HONESTIDAD En las relaciones sexuales y amorosas la lealtad es un requisito, las intenciones tienen que estar claras y tienen que explicitarse. Se tiene que tener siempre la honestidad de decir a la otra persona lo que realmente queremos de ella, los sentimientos leales que tenemos hacia ella y los compromisos reales que asumimos, aclarando, en su caso, los que no queremos asumir.  | 
|
| 
 Razonamiento  | 
 Ejemplo de comportamiento contrario  | 
| 
 Exige relaciones afectivas y sexuales sinceras y que ninguna persona de las implicadas en la relación reciba mensajes confusos, engañosos o contradictorios.  | 
 Decir a una persona que se está enamorado o enamorada cuando sólo se quiere un rollo.  | 
| 
 SALUD SEXUAL En las relaciones sexuales y amorosas hay que cuidar la salud propia y la de la otra persona, no asumiendo prácticas de riesgo que puedan provocar infecciones, otros problemas de salud o un embarazo no deseado.  | 
|
| 
 Razonamiento  | 
 Ejemplo de comportamiento contrario  | 
| 
 Implica comportarse con responsabilidad y requiere de conocimientos correctos sobre anticoncepción y prevención de infecciones de transmisión sexual.  | 
 Mantener relaciones sexuales coitales sin preservativo cuando se tiene conocimiento de sufrir una infección de transmisión sexual.  |